“¡Lo más difícil no es amar a Dios sino dejarse amar por Él!”

Este video es una propaganda de LG Group que recientemente ha tratado de actualizar su eslogan sugiriendo que “LG” significa “Life’s Good” (“La vida es buena”), con toda una filosofía de fondo, filosofía que no tiene un discurso explícito, sino que trata de transmitr un mensaje a través de gestos, imágenes, expresiones del cuerpo, acciones silentes, etc.

Elementos apostólicos:

Si bien se dieron cuenta, todo estaba “fríamente” calculado para que este mendigo se encuentre con su familia. Los televisores que pusieron detrás de él, los mendigos que vinieron a compartir con él, la persona que estaba hablando por celular, etc. Todo como que confluye en el personaje. Aquí podríamos abordar el tema desde una analogía con cómo es Dios con nosotros. Muchas veces, nos enfocamos en nuestra búsqueda de Dios desde nuestro interior, sin embargo, perdemos de vista como Dios nos busca a nosotros. Como decía Benedicto XVI: “La búsqueda que nosotros tenemos de Dios, es participación de su búsqueda por nosotros”. Si nosotros tenemos hambre de encontrarnos con Dios, ¿cómo será el hambre de Dios de encontrarse con nosotros? Él nos ama y esto no debe ser solamente un criterio abstracto en nuestra mente, hay que descubrir cómo Él nos ama. Dios también tiene todo “amorosamente calculado” para que nosotros nos abramos a su Amor. Dios nos tiene en el centro de su existencia,Él hace confluir todo hacia nosotros por amor. La creación por ejemplo. ¿Qué sería de un bello paisaje sin alguien que pueda contemplarlo? Toda la naturaleza está creada para cada uno de nosotros por amor. U otro ejemplo, cuando la gente dice “No existen las coincidencias”. Si nos quedáramos solamente en esa frase, quedaría vacía… Hay que decir, no existen las coincidencias porque hay Alguien que está detrás de todo y quiere hablarnos del amor que tiene por nosotros”, incluso a través del mal “Dios saca bienes para los que lo aman” como diría San Pablo. Toda a la realidad tiene un carácter personal, nuestra vida está inmersa en un diálogo permanente entre Dios y tú. A través de esta realidad (Su Palabra en las Escrituras, la liturgia, los buenos consejeros, las “diocidencias”, la belleza de la creación, las experiencias interiores más profundas, el mal que ocurre, los pobres, etc. Dios nos llama, Dios quiere tocar nuestros corazones con su Amor.

Por otro lado, podríamos hablar de dos dinamismos. En primer lugar, si se dieron cuenta, cuando la hija se acerca el padre retrocede. Aquí podemos ver una analogía de como es nuestra respuesta, algunas veces, al Amor de Dios con nosotros. Como dice el Papa Francisco: “Esto puede parecer una herejía, pero ¡es la verdad más grande! Más difícil que amar a Dios es ¡dejarse amar por Él!” En ese sentido, !no tengamos miedo al Amor! Hay que abrirnos a su ternura, a su Misericordia…

“El Señor nos ama con ternura. El Señor conoce esta bella ciencia de las caricias, esta ternura de Dios. No nos ama con las palabras. El se acerca –cercanía- y nos da ese amor con ternura. ¡Cercanía y ternura! Estas dos maneras del amor del Señor que se hace cercano y nos da todo su amor incluso con las cosas más pequeñas: con la ternura. Y este es un amor fuerte, porque la cercanía y la ternura nos hacen ver la fortaleza del amor de Dios”.

Y en segundo lugar, hay que “amar como Él nos ha amado” (Jn 15, 12). Hay que ir en busca de aquel mendigo de Dios, hay que dejar que Dios sea cercano a los demás a través de nosotros, hay que amar con la ternura con la cual Dios nos ama. De tal manera, que cuando amemos así, ellos vean, en ese amor, a Dios mismo y se encuentren con Él. Es necesario, salir de nosotros mismos para encontrarnos con Aquel que nos ama y para compartir ese mismo Amor con los demás.

Dinámica:

Sería interesante escribir la historia de amor que Dios tiene con cada uno de nosotros, cómo a través de la realidad Él nos ha hablado tanto… Para recordar y decir como aquel salmo tan conocido: “Dios ha estado grande con nosotros y estamos alegres” (Sal 125).